Mesobotox

¿En qué se diferencia del botox tradicional?

  • Zona de aplicación: El botox tradicional se inyecta en el músculo para relajarlo y suavizar las arrugas de expresión profundas (como las del entrecejo o la frente). El mesobotox se inyecta en microdosis en la piel, sin paralizar los músculos de la expresión facial.

  • Resultados: El mesobotox proporciona un efecto de rejuvenecimiento más sutil y natural. No se enfoca en las arrugas profundas, sino en la mejora general de la textura y luminosidad de la piel.

  • Sustancia: La toxina botulínica que se usa en el mesobotox se diluye en una solución que puede incluir vitaminas, minerales, péptidos o ácido hialurónico.

Beneficios del mesobotox

  • Mejora la textura de la piel: Reduce el tamaño de los poros y la producción de grasa, lo que ayuda a disminuir el brillo facial y el acné.

  • Reduce las líneas finas: Suaviza las arrugas superficiales del rostro, cuello y escote.

  • Aumenta la luminosidad: Proporciona un efecto de piel más tersa, radiante y saludable, ya que mejora la hidratación y nutrición de la dermis.

  • Disminuye la sudoración facial: Ayuda a controlar la hiperhidrosis (sudoración excesiva) facial.

  • Previene el envejecimiento: Al relajar la capa más superficial de los músculos, previene la formación de nuevas arrugas.

¿Quiénes son los candidatos ideales?

Este tratamiento es ideal para personas que buscan un rejuvenecimiento facial suave y natural, sin alterar sus expresiones faciales. También es una buena opción para quienes quieren mejorar la calidad de su piel, reducir los poros dilatados o complementar otros tratamientos estéticos.

Consideraciones

  • Los efectos del mesobotox son temporales y suelen durar entre 3 y 6 meses, después de los cuales el tratamiento debe repetirse.

  • Es importante que el procedimiento sea realizado por un profesional cualificado para garantizar la seguridad y obtener resultados óptimos.

  • La idoneidad del tratamiento dependerá de las necesidades específicas de la piel de cada persona, por lo que se recomienda una consulta previa